fuck u

Salimos a las cuatro de la madrugada. Llorando, yo por fuera... tu no se si por dentro por que en la cara no te vi nada, no tuvimos que pelear en la banqueta como la otra vez. No hubo caricias, ni besos como la otra vez... en tu cara no habia nada.

Odio tu indiferencia y tu camisa de numeros y en lugar de decirtelo nos quredamos dormidos. Sin promesas como siempre.

Nos miramos con ganas de mandarnos al diablo. Todo puede o no romperse. Puedemos o no dejar caer la bola de cristal. Total. En estos tiempos, los enamorados ya no creemos en la suerte. Podriamos gritarnos. Rompernos el corazón en plena avenida. Acariciarnos con navajitas para rasurar.

Pero nada de eso pasa.

Nos quedamos dormidos.